sábado, 6 de octubre de 2012

"La felicidad no es un destino. Es una filosofía de vida”. Burton Hills

Muchos de ustedes posiblemente se pregunten que quiero decir con este título de blog. Pues simplemente que muchas personas pueden estar realmente pensando mucho tiempo en la pregunta "¿Qué se supone que debo hacer con mi vida?" Cuando los clientes de coaching se acercan a mí con esta pregunta, les pido que consideren que es mucho más interesante otra pregunta: "¿Qué crees que harías en el caso de saber lo que quieres hacer con tu vida? " Una y otra vez, la respuesta vuelve a la" seguridad ", y cuando indagamos o profundizamos un poco la respuesta vuelve con " seguridad ", y nos encontramos con lo que verdaderamente está ocurriendo y es con la necesidad de "controlar ". O, al menos, la ilusión de control, ya que el control es siempre una ilusión. Aparte de nuestra intención y donde ponemos nuestra atención, realmente no podemos controlar la vida. Si reconocemos que la raíz de cualquier problema es que cuando se tratar de controlar algo que es imposible de controlar, toda la casa de naipes empieza a desmoronarse. Todos sabemos que tenemos un camino en la vida, y que hay dos opciones: seguirlo o no. Pero si no lo hacemos, no tenemos ningún control, en ambos sentidos. Puedo decir , por ejemplo, que si yo hubiera elegido ir a la escuela de música, me habría convertido en un músico profesional, pero la verdad es que no hay manera de que yo pudiera saber eso. Yo podría fácilmente haber terminado de programadora, o como sommelier, o lo que terminé siendo: una persona que ayuda a otros, que era lo que yo le dije que quería ser tan pronto como la edad de 2 o 3, y que es lo que he acabado hasta llegar a ser. Si, definitivamente ... Tu vida te habla: Las personas muchas veces hablan de que tener una verdadera vocación es parte de una naturaleza innata, algo que se nace, y puedo ver que mucho de esto tiene un gran impacto en la excusa de no dedicarnos verdaderamente a aquello que nos hace feliz. Pero la verdadera felicidad no tiene precio. No tiene que ver con la carrera, o con el éxito. Se puede sentir uno profundamente feliz pero confundido o desorientado. La felicidad no la podemos comprar, y nadie nos la puede dar. Es parte de la experiencia humana, y viene de dentro de nosotros. Podemos hacernos felices o infelices cuando no hay nadie y nadie más puede hacerlo. Esto se debe a que solo nosotros controlamos cómo pensamos y cómo respondemos a la vida. Básicamente, tomamos decisiones todos los días que determinar si vamos o no a disfrutar de nuestras vidas y ser la mejor versión de nosotros mismos. Si queremos ser felices, tenemos que hacer algo al respecto. El desarrollo de un estilo de vida feliz requiere trabajo y mucha práctica. Cuanto más practicamos la felicidad, más natural será. Y estos hábitos son: Perspectiva, Diálogo con nosotros mismos, Vivir el Presente; Gratitud, Dar, paz; Propósito; Autocuidado; y Amor Te pregunto ¿Cuál de estos hábitos te sientes que tienes que desarrollar más en este momento de tu vida? Buen fin de semana

1 comentario:

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.